En las dos ediciones siguientes volvieron a enfrentarse, primero en los cuartos de final de la edición 2014-15 marcada por ánimo de revancha en ambos lados tras la final continental perdida por los atléticos y la sucesión de siete partidos sin vencer de los blancos desde Lisboa, y la segunda nuevamente en la final. Con el neerlandés en el banquillo, las Águilas jugaron como locales 16 encuentros, en esos cotejos registró una asistencia global de 839 mil espectadores para un promedio general de 52 437 espectadores por partido, el más alto de la última década.