La campaña 1976-77 se comenzó ganando por cuatro tantos a cero al Levante U. D., en lo que fue un buen presagio de lo que iba a acabar siendo una magnífica temporada en la que el equipo volvió a ascender a Primera División. Las negociaciones en ambos casos avanzaron y, finalmente, se traspasó al jugador vasco, lo que proporcionó cuantiosos ingresos que permitieron al equipo acometer las obras para la construcción de la Escuela de Mareo.