Aquel año, la Federación Española de Fútbol tomó la decisión de ampliar el número de equipos de Primera División. La primera oportunidad de demostrar el potencial de la nueva plantilla llegó en el Campeonato Mancomunado Castilla-Sur. Luego de lograr el Mundial de Clubes ante San Lorenzo, Cristiano obtuvo su segundo Balón de Oro consecutivo, entrando en la lista junto a Johan Cruyff, Michel Platini y Marco van Basten de ser tres-veces ganadores del galardón.